Conall Devlin era un hombre de negocios implacable, dispuesto a llegar a lo más alto. Para conseguir la propiedad con que pensaba coronar su fortuna aceptó una cláusula nada habitual en un contrato. ¡Domesticar a la díscola y caprichosa hija de su cliente!
Amber Carter parecía llevar una vida lujosa y frívola, pero en el fondo se sentía sola y perdida en el mundo materialista en que vivía. Hasta que una mañana su nuevo casero se presentó en el apartamento que ocupaba para darle un ultimátum. Si no quería que la echara a la calle, debía aceptar el primer trabajo que iba a tener en su vida: estar a su completa disposición día y noche.” DRIVE