“Book Descriptions: Ante un Estado que niega la realidad y apela al artificio de un mundo feliz hecho de simulacros y falacias, el ser «chéveres» se advierte como una máscara, el espejo trucado que nos perpetúa en el autoengaño, incapaces de asumir nuestro destino. Frente al colectivismo oficial que uniforma y masifica, urge rescatar la identidad individual y lo múltiple como único contrapeso a la inquisición igualitarista.
En plena urgencia de definiciones, las diferencias entre ser hombre y ser mujer en Venezuela no solo se manifiestan en los valores y conductas que rigen la vida social del país: permean el habla cotidiana, desde el tierrúo hasta la sifrina, del pran a la «vieja loca». Somos lo que hablamos y este libro surge de las voces de la calle, pero Gisela Kozak Rovero trasciende la diversidad sociolingüística y de género para atisbar que es precisamente en lo diverso y no en delirios unificadores como puede haber salidas al choque devastador de nuestras divergencias.
Con la libertad del humor y la ironía, un verbo punzante, y transitando con más incertidumbres que certezas por el turbulento laberinto en que nos convertimos, Kozak Rovero ataca, aunque no sin indulgencia, el mito del «cheverismo» para (re)descubrir que los venezolanos en realidad no somos —acaso nunca lo fuimos— ni tan chéveres ni tan iguales.” DRIVE