Si el amor platónico dice sí..., si un día, en una parada de autobús, un hombre que fantasea con encontrarse a la mujer de quien estuvo enamorado sin ser correspondido se la encuentra, si ella le toma del brazo, se muestra ilusionada, ríe: ¿entonces qué hacer con la realidad? Sergio Prim, geógrafo de profesión, ha visto cómo su sueño de amor por Brezo Varela se cumplía y ha sentido pánico.
A lo largo de la novela buscará un hueco, un punto de quietud, una zona exenta de preocupaciones. Tal vez pueda vencer allí su dificultad para entender la escala de los otros -esto es, el modo según el cual los otros establecen relaciones de semejanza, distancia o proximidad- , acaso logre entonces poner a salvo su relación con Brezo.
La escala de los mapas es la historia del miedo a ser amado y su metáfora, pero es también una reflexión sobre la diferencia entre las cosas que ocurren en el espacio y aquellas otras que suceden en el tiempo. Escrita en un lenguaje renovador, participa de cierta concepción de la literatura como arma blanca capaz de hacer una hendidura en el aire, en los movimientos, en nuestra percepción del mundo.” DRIVE